IV Muestra de Cine con la Naturaleza ForadCamp
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Anima, de Simon Gillard (Bélgica, 2014, 18 min.)
Entre los hombres y sus gestos ásperos y serios, se libera un alma. Se escapa de nuestro mundo en un viaje curioso, un vuelo a través de un extraño pueblo en el oeste de África. Sus imágenes poderosas y evocadoras se mezclan con sus sonidos estimulantes para darnos una visión sin límites de este sueño.
Calendar girls, de Lisa Birke (Canadá, 2014, 4 min.)
Un espectáculo de humor revela la falacia de la selfie y los mitos de la objetivación mientras que restaura la humanidad de la Chica del Calendario despojada. El trabajo fue filmado de manera solitaria por la artista en el sudoeste de Ontario, Canadá, a lo largo de un año, de enero a diciembre de 2014.
Carta a Nura, de Macià Florit (España, 2014, 12 min.)
Carta del director a la tierra, Nura, antiguo nombre fenicio de la isla de Menorca. A partir de una excursión al poblado de Son Catlar, un asentamiento Talayótico en el término de Ciutadella, una voz autobiográfica destila las impresiones suscitadas a raíz de la visita. “Carta a Nura” es una película sobre la cultura Talayótica que oscila entre la correspondencia filmada y el ensayo cinematográfico. Pero quizás esto sea tan solo una excusa para ofrecer una reflexión sobre la identidad menorquina.
Comer del monte, de Andrea Ruffini (Paraguay, 2014, 30 min.)
El Chaco paraguayo es la zona que registra la tasa de deforestación más alta del mundo. Realizado en colaboración con jóvenes de las comunidades de Enxet Enlhet y Sanapana, “Comer del monte” nos ofrece un retrato de la vida cotidiana de unas comunidades indígenas del Chaco Central de Paraguay, y nos muestra cómo los pueblos originarios viven su relación física y espiritual con la selva, sus plantas y sus animales.
Espés, de Tànit Fernández e Isaac Rodríguez (España, 2013, 12 min.)
Espés es un pueblo del Pirineo aragonés que, como muchos otros en España, corre el riesgo de desaparecer, pues sólo quedan cuatro habitantes. En este retrato documental se sienten las narraciones de estos cuatro habitantes que reflexionan sobre lo que ha sido el pueblo, lo que queda de él, y el miedo a lo que pasará cuando ya no estén, mientras se percibe, omnipresente, el paso implacable del tiempo.
Extremos – Viaje a Karukinka, de Federico Molentino y Juan M. Ferraro (Argentina, 2014, 27 min.)
Tierra del Fuego contiene un presente de antípodas, de polaridades, de extremos. Sus paisajes, la flora y la contrastada ciudad en constante crecimiento, se ofrecen como lienzo para proyectar imágenes de la comunidad originaria de los selknam, haciendo convivir el pasado y el presente en un mismo tiempo narrativo. A través del mapping y el montaje, el cortometraje articula el confluir de rituales originarios y conductas contemporáneas en diferentes situaciones cotidianas de la región.
Komorebitachi, de Sophie Perrier y Masanori Omori (Suiza-Japón, 2014, 15 min.)
Un paisaje natural en Japón sirve como escenario para aportar una mirada reposada de los rituales de la vida y su movimiento secreto. Un leñador corta un árbol, pidiendo su perdón, mientras los demás aldeanos plantan otro, a fin de restaurar el equilibrio de la naturaleza.
Prisioneros del Kanún, de Roser Corella (España, 2013, 25 min.)
Desde el colapso del comunismo en Albania, los antiguos feudos de sangre han vuelto a arruinar algunas vidas, especialmente en las zonas montañosas del norte del país, en donde muchas familias viven aisladas, encerradas en sus casas por temor a las venganzas de sangre. El recuperado código ancestral del Kanún, que había regido la vida rural durante cinco siglos de ocupación extranjera, incluye el derecho a matar para vengar un asesinato anterior: la sangre se paga con sangre.
Sinfonía de galernas, de Nadia Penella (España, 2014, 14 min.)
Nuevamente los temporales azotan la costa cantábrica. La figura del dique cobra sentido como muro represor de la rabia contenida. Las voces de trabajadores portuarios y de pescadores, encargados de estaciones costeras, son arrastradas por la marea a travás de los canales de radiofrecuencia. “Sinfonía de galernas” nos propone una reflexión sobre el comportamiento del mar, retratándolo a través de su relación con el ser humano: el mar como amenaza y el mar como sustento.
Trento Symphonia, de Flatform (Francia-Italia, 2014, 19 min.)
Se pone el sol en un paisaje de montaña. Una orquesta y un coro, junto con un gran grupo de adolescentes que actúan como atriles vivientes, son filmados mientras tocan la primera parte de la octava sinfonía de Mahler. En “Trento Symphonia” el paisaje se convierte en un punto de convergencia entre contemplación, correspondencia e imaginación.
Los cortometrajes de la Sección Oficial optan a los premios: Mejor Documental, Premio del Público y Premio de Distribución.
El Premio al Mejor Documental, dotado con 300 euros, es escogido por un Jurado que este año está formado por tres profesionales del mundo del cine documental: Carmen Ávalos, Juanjo Giménez y Jorge Tur.
El Premio del Público, patrocinado por Clickforfestivals, se decide según la votación de los espectadores que se realiza el día de las proyecciones.
El Premio de Distribución, es concedido por Promofest y consiste en la distribución internacional del corto seleccionado.